La fundadora y primera directora del Centro Recreacional Ryoichi Jinnai de la Asociación Peruano Japonesa, Elena Yoshida de Kohatsu recibió un merecido homenaje póstumo en el Museo de la Inmigración Japonesa. Se realizó una exposición de su vida dirigencial y vida personal la cual duró tres meses.
La exposición recibió numerosos visitantes que pudieron conocer un poco más la historia de Elena Kohatsu, quien hasta la actualidad ha sido la única mujer presidenta de la APJ. Doña Elena nos dejó hace 14 años, el 26 de febrero de 1998, sin embargo, su desempeño dirigencial se mantiene vigente.
El Centro Recreacional para la tercera edad fue fundado hace 20 años gracias a la iniciativa de Elena Kohatsu, quien se desempeñó como primera directora. Los frutos de su dedicación y trabajo son reflejados en la grandioso labor que se mantiene hasta la actualidad, la formación de las voluntarias Shiawase, así como el recojo en domicilio de los usuarios de Jinnai.
Es por ello que los integrantes del centro recreacional recuerdan constantemente a la primera directora. Una muestra fue la visita durante una semana a lo que ha sido la exposición en homenaje a Elena Kohatsu.
Expresaron su gratitud y constante admiración a quien ha sido la fundadora de ?Ryoichi Jinnai?, una institución que en la actualidad atiende aproximadamente a cien personas por día.
En el recorrido a la muestra les llamó la atención especialmente las fotografías familiares de Elena Kohatsu, cuando ella era muy joven. Nació en Lima, el 11 de abril de 1929. A finales de la década de los 40 ingresó en el primer intento a la facultad de medicina en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. En 1949 se casó con Taro Kohatsu. Su entrega institucional comenzó como delegada zonal de la Asociación Femenina Peruano Japonesa, que presidió en dos períodos.
?Elena Kohatsu ha trabajado constantemente, dejándonos un legado invalorable para la colectividad nikkei?, coincidieron las obaachan y ojiichan del Centro Jinnai al recordar el proceder dirigencial de Elena Yoshida de Kohatsu.
Fuente: Peru Shimpo